VIVIR EN EL PASADO

“’Díganle a José que perdone, por favor, la terrible maldad que sus hermanos cometieron contra él. Así que, por favor, perdona la maldad de los siervos del Dios de tu padre’. Cuando José escuchó estas palabras, se echó a llorar” (Génesis 50:17 NVI).

José había sido claro con ellos, les había manifestado perdón al afirmarles que había sido Dios el causante de todo lo que le había pasado, que estaba feliz de encontrarlos y que deseaba recuperar todo lo perdido. Sin embargo sus hermanos, no habían aprendido a dejar el pasado atrás y comenzar de nuevo. Seguían viviendo en el temor del rencor y la venganza, su vida estaba llena del temible “fantasma del pasado”. Por eso José se puso a llorar.

La inseguridad del presente es vivir pensando en el pasado. Cuantas personas viven bajo la sombra de sus recuerdos pasados, bloqueados, no avanzan a pesar de tener al frente el camino libre y despejado. Satanás aprovecha muy bien esta debilidad humana y se lanza al ataque con insinuaciones que logran su cometido: “qué haces en la iglesia… mira tu vida de pecado”, “no arregles los problemas en tu casa, recuerda que no vas a vencer tus vicios”, “no pidas perdón, no lo mereces”, “¿tú crees que te perdonó?, lo que le has hecho no tiene perdón”, “¿quieres cambiar?, nunca lo podrás”, y así van las insinuaciones satánicas, una tras otra, y el pobre ser humano asiente con la cabeza, mira para atrás y se convence que no merece nada.

Por otro lado, vivir en el pasado es vivir un perdón a medias, porque no basta perdonar, sino también aprender a ser perdonado. Cuantas personas ya olvidaron las ofensas que le hicimos, ellos han practicado el perdón divino, pero nosotros seguimos recordando lo que cometimos y desmereciendo el perdón hacia nosotros. Además, al sentirnos indignos de dejar el pasado y de ser restaurados por el perdón, desperdiciamos un presente de alegría y e vida plena.

El pasado solo sirve para aprender de los errores y no cometerlos más, el presente es vivir a plenitud, listos para lo que trae el futuro incierto. Satanás conoce de la carga del pasado, de los miedos del presente y de la incertidumbre del futuro, pero donde ataca más son en tus recuerdos y en el peso de un pasado en pecado. Nelson Ned, un cantante brasileño cristiano, antes de cantar a Cristo cantaba para el mundo y alcanzó la fama, y eso le trajo una vida de desenfreno y prácticas sucias. Un día conoció a Cristo y le entregó la vida. Él cuenta que su pasado lo seguía y atormentaba, Satanás arremetía diciéndole que él no podía ser perdonado por todas las cosas que había hecho, hasta que Nelson encontró la salida para dejar el pasado y disfrutar el presente. Él aprendió una respuesta cuando el enemigo le refregaba en la cara su pasado: “Cuando el enemigo me recuerda el pasado yo le recuerdo su futuro”.

Mi amigo (a), es momento de voltear la página de tu vida, no te quedes como los hermanos de José viviendo en el pasado, vive el presente. Cómo su mismo nombre lo dice “presente”, es decir, “regalo”, y los regalos se disfrutan y se aprovechan. ¡Vive el presente, camina hacia el futuro! Vive como Pablo: “Más bien, una cosa hago: olvidando lo que queda atrás y esforzándome por alcanzar lo que está delante…”.[1]No puedes hacer nada por el pasado, más que aprender, perdonar y olvidar; pero por el presente puedes hacer todo, en él alcanza todo lo que te propusiste. ¡Aprovecha al 100% el día de hoy!

Pr. Joe Saavedra

Desde la línea de batalla  y un poquito antes del retorno de Cristo…

Ubícame en mi página web: www.poder1844.org


[1] Filipenses 3:13 NVI

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *